Durante la semana, personal del departamento Tránsito realizó diversos operativos de control vehicular en diferentes puntos de la ciudad, con el objetivo de concientizar, prevenir y sancionar, buscando mejorar el tránsito en Casilda. Además, en la madrugada del domingo se llevaron a cabo controles de alcoholemia, donde un conductor alcoholizado, en un intento de fuga, embistió a un inspector de tránsito ocasionándole heridas de carácter leves.

En los operativos de control vehicular sorpresivos que se llevaron a cabo entre el martes 16 de agosto y hasta este domingo 21 de agosto, se controlaron  382 (trescientos ochenta y dos) vehículos, entre autos y motos, se labraron 45 (cuarenta y cinco) actas de infracción y se secuestraron 15 (quince) vehículos, de los cuales 12 (doce) son motocicletas, y 3 (tres) son automóviles. Las causas de los secuestros son escapes adulterados, conducción de menores de edad, conducción sin casco, y vehículos sin patente y sin documentación.

Por otra parte, en la madrugada del domingo 21 de agosto, inspectores de Tránsito llevaron a cabo controles de alcoholemia en la zona céntrica de la ciudad, donde se produjo un lamentable incidente cuando un inspector estaba realizando el control, el conductor entregó su carné de conducir y la tarjeta verde del vehículo, y al realizarle el control de alcoholemia, cuyo resultado fue de 1.53 gr/l de sangre, se dio a la fuga embistiendo al trabajador municipal, quien fue trasladado por el SIES, a la Clínica “Julián Moreno” para una mejor atención.

En ese centro de salud se le realizaron los estudios correspondientes y fue dado de alta en horas del mediodía.

Al haber abandonado la documentación en el control, el conductor fue identificado y se realizó la denuncia policial correspondiente.

En el operativo se realizaron 107 (ciento siete) controles, de los cuales 13 (trece) fueron positivos con dosajes que van de 0.66, a 2.99, se labraron 15 (quince) actas de infracción, y se secuestraron 2 (dos) automóviles.

Es de destacar que el límite de alcohol en sangre sancionable para automovilistas es de 0.50, para los motociclistas es de 0.20, mientras que para el transporte público de pasajeros, sean colectivos o taxis, es de 0.

La intención de la Municipalidad de Casilda con estos controles es cuidar el bien más preciado de sus ciudadanos, que es la vida, tanto de los que se conducen en vehículos como también de los peatones que puedan ser víctimas de conductores alcoholizados. El no dejar seguir a conductores alcoholizados previene siniestros y sus consecuencias.

El llevar adelante estos controles es una política de estado que continuará en el tiempo, siempre pensando en la seguridad de la ciudad, en la seguridad de su gente y en CUIDAR LA VIDA.