Con la colaboración de personal policial de la Unidad Regional IV y gracias a dos denuncias, las autoridades interrumpieron una fiesta con más de cuarenta asistentes donde la mayoría eran menores de edad 

Este jueves a penas pasados unos minutos de la hora 00, el director de Control Urbano y Convivencia, Marcelo Cavallieri en conjunto con uniformados de la U.R.IV, lograron suspender lo que aparentaba ser el festejo de un cumpleaños en un domicilio de barrio Barracas. 

Las fuerzas de seguridad llegaron hasta el lugar en tres móviles y constataron los hechos junto a Cavallieri. Él mismo relató que se encontraron con unos cuarenta menores de edad dispuestos a seguir con el encuentro a pesar de que las reuniones sociales y/o afectivas estén prohibidas por un DNU del gobierno nacional. 

Acto seguido y luego de que desde Fiscalía habiliten realizar las actuaciones pertinentes para con el dueño de la vivienda, se solicitó la presencia de adultos mayores para que retiren a los jóvenes de la vivienda entendiendo que no podía seguir allí.

 Vale destacar la responsabilidad de aquellas personas que realizaron las denuncias pertinentes, teniendo en cuenta que una fue a la Central de Monitoreo de la Municipalidad de Casilda, y la otra al 911, número de emergencias al cual también se le notificó lo que estaba sucediendo.