Durante la semana, personal del departamento Tránsito realizó diversos operativos de control vehicular en diferentes puntos de la ciudad, con el objetivo de concientizar, prevenir y sancionar, buscando mejorar el tránsito en Casilda. Además, en la madrugada del domingo se llevaron a cabo controles de alcoholemia con miembros de la Agencia Provincial de Seguridad Vial.

En los operativos de control vehicular sorpresivos que se llevaron a cabo entre el lunes 4 de julio y hasta este domingo 10 de julio, se controlaron  482 (cuatrocientos ochenta y dos) vehículos, entre autos y motos, se labraron 72 (setenta y dos) actas de infracción y se secuestraron 26 (veintiseis) vehículos, de los cuales 21 (veintiuno) son motocicletas, y 5 (cinco) son automóviles. Las causas de los secuestros son escapes adulterados, conducción de menores de edad, conducción sin casco, y vehículos sin patente y sin documentación.

Por otra parte, en las madrugadas del sábado 9 de julio y del domingo 10 de julio, se llevaron a cabo controles de alcoholemia en el ejido urbano, los que arrojaron resultados preocupantes.

En la madrugada del sábado se realizaron 54 (cincuenta y cuatro) controles, de los cuales 8 (ocho) fueron positivos con dosajes que van desde 0.74 a 2.13.

Se labraron 11 (once) actas de infracción y se secuestraron dos vehículos, una motocicleta y un automóvil.

Mientras que en la madrugada del domingo, se realizaron 66 (sesenta y seis) controles, de los cuales 19 fueron positivos en cuanto a la presencia de alcohol en sangre, lo que representa que cerca del 30% de los vehículos controlados tenían conductores alcoholizados.

Otro dato preocupante es la cantidad de alcohol en sangre de esos conductores. De los 19 positivos, el de menor dosaje fue de 0.61, mientras que se registraron alcoholemias positivas con 2.65 y 2.99.-

Se labraron 20 (veinte) actas de infracción y se secuestró una motocicleta.

Es de destacar que el límite de alcohol en sangre sancionable para automovilistas es de 0.50, para los motociclistas es de 0.20, mientras que para el transporte público de pasajeros, sean colectivos o taxis, es de 0.

La intención de la Municipalidad de Casilda con estos controles es cuidar el bien más preciado de sus ciudadanos, que es la vida, tanto de los que se conducen en vehículos como también de los peatones que puedan ser víctimas de conductores alcoholizados. El no dejar seguir a conductores alcoholizados previene siniestros y sus consecuencias.

El llevar adelante estos controles es una política de estado que continuará en el tiempo, siempre pensando en la seguridad de la ciudad, en la seguridad de su gente y en CUIDAR LA VIDA.