Durante la semana, personal del departamento Tránsito realizó diversos operativos de control vehicular en diferentes puntos de la ciudad, con el objetivo de concientizar, prevenir y sancionar, buscando mejorar el tránsito en Casilda. Además, en la madrugada del domingo se llevaron a cabo controles de alcoholemia en diversos puntos de la ciudad, donde un conductor se dio a la fuga poniendo en riesgo su vida, la de los inspectores y la de la gente que transitaba por la ciudad.
En los operativos que se llevaron a cabo entre el lunes 12 de junio hasta este domingo 18 de junio, se controlaron 453 (cuatrocientos cincuenta y tres) vehículos, entre autos y motos, se labraron 54 (cincuenta y cuatro) actas de infracción y se secuestraron 13 (trece) vehículos, de los cuales 3 (tres) son automóviles, y 10 (diez) son motocicletas. Las causas de los secuestros son escapes adulterados, conducción de menores de edad, conducción sin casco, y vehículos sin patente y sin documentación.

Por otra parte, en la madrugada del domingo 18 de junio, se llevaron a cabo controles de alcoholemia dentro del ejido urbano. Se realizaron 123 (ciento veintitrés) controles, de los cuales 11 (once) arrojaron resultados positivos en cuanto a la presencia de alcohol en sangre en los conductores, siendo dos de ellos motociclistas. El rango de alcoholemia positiva detectada fue de 0.24 (un motociclista) a 2.49. Se labraron 15 (quince) actas de infracción y se secuestraron dos vehículos, una moto y un auto.

La particularidad que se vivió en el control fue la fuga de un automóvil que al ingresar a la zona del control y advertir la presencia de los inspectores, frenó en plena calle y comenzó a transitar marcha atrás, luego tomó calle España en contramano desde Lisandro de la Torre hasta Güemes donde finalmente fue detenido por personal de Comando
Radioeléctrico de la Unidad Regional IV. El conductor, un hombre mayor de edad oriundo de Sanford, presentaba 2.49 de alcohol en sangre y puso en riesgo la vida de los inspectores que formaban parte del control, la vida de los conductores y de los demás ciudadanos que transitaban por las calles céntricas en horas de la madrugada del domingo, y hasta su propia vida.

Es de destacar que el límite de alcohol en sangre sancionable para automovilistas es de 0.50, para los motociclistas es de 0.20, mientras que para el transporte público de pasajeros, sean colectivos o taxis, es de 0.

Estos operativos de control continuarán desarrollándose en horarios rotativos, durante todos los días de la semana, y en los distintos barrios de la ciudad.

La intención de la Municipalidad de Casilda con estos controles es cuidar el bien más preciado de sus ciudadanos, que es la vida, tanto de los que se conducen en vehículos como también de los peatones que puedan ser víctimas de conductores alcoholizados. El no dejar seguir a conductores alcoholizados previene siniestros y sus consecuencias.

El llevar adelante estos controles es una política de estado que continuará en el tiempo, siempre pensando en la seguridad de la ciudad, en la seguridad de su gente y en CUIDAR LA VIDA.