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Durante la semana, personal del departamento Tránsito realizó diversos operativos de control vehicular en diferentes puntos de la ciudad, con el objetivo de concientizar, prevenir y sancionar, buscando mejorar el tránsito en Casilda. Además, en la madrugada del domingo se llevaron a cabo controles de alcoholemia en diversos puntos de la ciudad.

En los operativos que se llevaron a cabo entre el lunes 24 de octubre hasta este domingo 30 de octubre, se controlaron 214 (doscientos catorce) vehículos, entre autos y motos, se labraron 34 (treinta y cuatro) actas de infracción y se secuestraron 13 (trece) vehículos, de los cuales uno es un automóvil y los 12 (doce) restantes son motocicletas. Las causas de los secuestros son escapes adulterados, conducción de menores de edad, conducción sin casco, y vehículos sin patente y sin documentación.

 

Por otra parte, en la madrugada del domingo 30 de octubre, se llevaron a cabo controles de alcoholemia dentro del ejido urbano. Se realizaron 32 (treinta y dos) controles, de los cuales 5 (cinco) fueron positivos, y se labraron 7 (siete) actas de infracción. Los dosajes verificados fueron 0.66, 0.69, 1.03, 1.02, y 1.60.

 

Además, los integrantes del Cuerpo de Inspectores de la Dirección de Tránsito estuvieron abocados durante el fin de semana al control de tránsito en la largada simbólica del Rally Ciudad de Casilda y en el desarrollo de la Fiesta Nacional del Oro Dulce y Fiesta Provincial de la Miel.

 

Estos operativos de control continuarán desarrollándose en horarios rotativos, durante todos los días de la semana, y en los distintos barrios de la ciudad.

Es de destacar que el límite de alcohol en sangre sancionable para automovilistas es de 0.50, para los motociclistas es de 0.20, mientras que para el transporte público de pasajeros, sean colectivos o taxis, es de 0.

 

La intención de la Municipalidad de Casilda con estos controles es cuidar el bien más preciado de sus ciudadanos, que es la vida, tanto de los que se conducen en vehículos como también de los peatones que puedan ser víctimas de conductores alcoholizados. El no dejar seguir a conductores alcoholizados previene siniestros y sus consecuencias.

 

El llevar adelante estos controles es una política de estado que continuará en el tiempo, siempre pensando en la seguridad de la ciudad, en la seguridad de su gente y en CUIDAR LA VIDA.